Black Friday 2016… ¿el más digital?

Su origen lo encontramos en Estados Unidos y hace referencia al viernes siguiente al Día de Acción de Gracias (que se celebra cada año el cuarto jueves de noviembre), en el que se registran fuertes descuentos en los comercios y que es considerado el día en el que comienza la temporada de compras navideñas en Estados Unidos. Precisamente de este hecho proviene su nombre (“viernes negro”), por tratarse del día en el que los comercios ven cómo pasan sus cuentas de números rojos a números negros.

En España, se trata de una jornada que se celebra desde hace 4 años, después de que el Gobierno aprobara una ley en 2012 para flexibilizar las fechas en las que se pueden celebrar rebajas. Tras el récord registrado el año pasado de 300 millones de euros recaudados en la campaña de 2015, las previsiones apuntan a que este año se batirá dicho récord, con una recaudación próxima a los 1.267 millones de euros en España entre el Black Friday y el Cyber Monday (el lunes posterior a acción de gracias, este año celebrado el 28 de noviembre).

Un Black Friday digital

Los descuentos del Black Friday llegan a todo tipo de comercios, ya sean físicos u on-line. De hecho, cada vez se extiende más la compra digital (Amazon espera en la edición de este año batir su récord de 570.000 productos vendidos en un solo día), cosa que no es de extrañar teniendo en cuenta que el comercio electrónico está en pleno auge: según un estudio realizado por CaixaBank, el e-commerce ha crecido un 26% en nuestro país en el último año.

Pero la digitalización no solo ha llegado al “dónde” compramos, sino que también al “cómo” compramos. Hoy en día existen diversos sistemas de pago con los que podemos dejarnos la cartera en casa.

Por ejemplo, desde CaixaBank se ofrece el servicio Caixabank Pay, una aplicación que permite pagar directamente desde el teléfono móvil. También, para aquellos que tengan un smartphone Samsung, pueden utilizar la aplicación Samsung Pay.

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Gracias a la tecnología contactless, también es posible utilizar la Pulsera Visa Contactless de CaixaBank o la tarjeta TAP contactless, que se coloca en el reverso exterior del móvil.

Y para no perder de vista todos los movimientos y controlar las compras realizadas, también existe el servicio digital Mis Finanzas, con el que es posible gestionar todas las cuentas al detalle de forma visual y sencilla mediante gráficos.

Compras seguras

En el caso de las compras on-line, no hay que perder de vista las recomendaciones y consejos para realizar transacciones seguras, como por ejemplo no abrir correos electrónicos de origen desconocido, tener actualizado el navegador e instalar parches del sistema operativo o no utilizar PIN ni contraseñas fáciles de deducir.

Además, CaixaBank, para asegurar que no haya ningún problema de este tipo, pone a disposición de sus clientes el servicio gratuito CaixaBankProtect, que garantiza la seguridad de todas las operaciones y evita cualquier fraude.